No tener planes...ya es un plan.

Hoy he tenido un día de los difíciles. Me tocaba ir al hospital - simple rutina, nada grave ni que me apetezca desarrollar en este espacio, por el momento -.

Después, gestiones varias y visita rápida al ciber para consultar unos correos que esperaba.

Entre los mensajes, demasiados que me ofertan y ofrecen "arreglarme" las próximas fechas.

E-dreams me advierte de las últimas ocasiones para este puente, que se ha quedado con un día menos. Es así, cuando la Constitución amanece un sábado.

Pues , lo siento mucho, ya tengo plan: ver una peli larga titulada "Bailando entre cajas".

Atrápalo se esmera en innumerables propuestas para esa noche extraña conocida como "Nochevieja". Para que me lo pase muy muy bien y toda esa retahila propia de la jornada.

Pues, para esa no tengo plan....ni ganas de planificar.

Me gustaría tener una noche tipo "Ricas y famosas" de Cukor. Cabaña de madera, chimenea, un buen vino y una mujer que escape de una fiesta estupenda y "superdivertidadelomás"; que robe un buen cava y piense que es mejor pasar esa noche conmigo, bajo la manta de cuadros y frente a un buen fuego. Aquí caben todo tipo de pensamientos...no el único; aclaro. Pero, es imprescindible que sea una sorpresa, que es toda la gracia de la escena.

Demasiados planes que roban lo espontáneo y demasiadas expectativas que acaban en una consabida resaca.

No es mi caso...de apetecerme algo más factible, ahí tenemos esa playa y la posibilidad de tirar esos castillos de caja que sorprenden. Son más espectaculares de lo que parece.

Comenzar el año mirando el cielo.

No está nada mal. Pero esto es anticiparme , a veces, no tener planes es el mejor plan.